Soy una de esas chicas que caen por todos lados: he aquí por qué
Soy una de esas chicas con las que los chicos se enamoran. Este es el motivo: tengo confianza, soy divertido y sé cómo soltarme y divertirme. No me tomo demasiado en serio, y sé disfrutar un buen rato. Cuando se trata de citas, no busco nada serio. Solo quiero divertirme y conocer gente nueva. Si estás buscando pasar un buen rato, definitivamente deberías conocerme.
No soy una supermodelo sexy, no soy rica y estoy lejos de ser perfecta, pero de alguna manera, no tengo problemas para encontrar chicos. No es que yo esté mirando tampoco. Tengo demasiadas cosas en mi vida como para preocuparme por conseguir un novio. Por extraño que parezca, creo que esa es la razón exacta por la que los chicos tienden a estar interesados en mí.
Es mi actitud lo que es sexy.
No importa cuán bonita sea una mujer, es su actitud lo que la define. Siempre soy educado, amable y completamente yo mismo, no importa cómo pueda parecer eso. No me asusto de lo que soy ni me preocupa que pueda asustar a un chico. El chico correcto amará cada centímetro y capa de mí, así que no tiene sentido endulzar quién soy.
Trato a los chicos como amigos desde el principio.
No me exagero con el coqueteo cuando conozco a un chico. Lo trato como si hubiera sido un amigo mío durante años y le hablo como si ese fuera el caso. Soy juguetón mientras mantengo mi inteligencia al frente y al centro, porque embrutecerme por miedo al rechazo no es una opción.
Siempre estoy sonriendo, riendo y fácil de abordar.
Soy una persona burbujeante por naturaleza, por lo que es difícil para mí atenuar esa luz. Tengo la risa más fuerte en la habitación y siempre encuentro formas de hacer reír a la gente (mientras me río de mí mismo en el proceso si hago o digo algo estúpido). No evito mis errores, me río de ellos y los aprovecho al máximo.
Soy honesto acerca de quién soy.
No actúo de cierta manera para llamar la atención de un chico porque, en primer lugar, no estoy buscando atención. Siempre me mantengo fiel a lo que soy, incluso si es el chico más guapo que he visto en mi vida. No veo el sentido de fingir hasta que lo haga mío porque prefiero que un chico me ame por lo que soy, en serio, no hay mejor sentimiento. A veces soy honesto casi hasta el extremo y los chicos siempre están genuinamente intrigados por mi personalidad sin editar.
No dejo mi vida por los chicos.
Cuando conozco a un chico nuevo con el que vale la pena salir, no consigue mi tiempo con un chasquido de dedos. Tiene que trabajar para ganarse el lugar en mi vida. No cancelo planes, abandono a amigos ni abandono mis prioridades para encajar en él. Trabajo en torno a lo que ya tengo en marcha para dejarle espacio en mi vida y lo hace trabajar más duro para asegurarse de que planea tiempo conmigo más pensativo. Los chicos no solo respetan ese tipo de desafío, sino que lo aman.