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Mala iluminación y espacios reducidos: las luchas de tener sexo en la ducha

El sexo en la ducha es una de las fantasías más populares, y por una buena razón. Hay algo en el agua caliente, el vapor y los espacios cerrados que pueden hacer que incluso el sexo más vainilla se sienta emocionante. Pero como sabe cualquiera que haya intentado tener sexo en la ducha, no siempre es tan sexy como parece. La mala iluminación y los espacios reducidos pueden hacer que sea difícil estar ocupado en la ducha sin sentir que estás en un armario de escobas abarrotado. Aquí hay algunos consejos para ayudarlo a aprovechar al máximo el sexo en la ducha, incluso cuando el espacio no es el ideal.


En las películas, el sexo en la ducha parece una forma apasionante de intimar con tu pareja. En realidad, la experiencia no es tan emocionante. De hecho, es simplemente peligroso. Podría terminar rompiéndose una pierna, golpeándose la cabeza o recibiendo jabón en todos los lugares equivocados. Es por eso que el sexo en la ducha no debería estar en tu lista de deseos. Está lleno de luchas.

Lucharás por la temperatura.

Te gustan las duchas calientes, pero tu novio solo toma frías. Eso significa que vas a pasar el cincuenta por ciento de tu tiempo en el baño peleando por la temperatura del agua. No hay nada sexy en eso.

Estarás atrapado en una posición sexual.

No hay tantas posiciones sexuales que un hombre y una mujer puedan usar en la ducha. Básicamente, tendrás que encontrar una manera de colocar tus manos contra la pared sin dejar que se deslicen. Buena suerte con eso.

Te entrará agua en la boca.

No importa si lo estás besando en los labios o debajo del cinturón. De cualquier manera, terminarás con agua en la boca. Y tus ojos. Y tu nariz. Básicamente, va a ser difícil respirar.


Tu vagina se secará.

Pensarías que sería más fácil para las mujeres tener sexo en la ducha, pero estarías equivocado. Esa agua le quita la lubricación natural a una dama, lo que significa que en realidad estará bastante seca ahí abajo. Es por eso que debes llevar un poco de lubricante si quieres tener sexo sin dolor.

En realidad, no te limpiarás.

En realidad, nadie se lava con champú o se afeita cuando salta a la ducha con su pareja. ¿De verdad quieres que te vea abrir las piernas para quitarte esa barba? De ninguna manera. Por eso dejarás que te enjabone con un poco de jabón, y eso es todo.


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